Mi primer amor siempre

Desde que tengo memoria siempre he visto la sonrisa de mamá, sus mejillas rosas, sus ojos brillantes, sus pecas y lunares, sus labios hermosos y su cabello ondeado. 

Ante cualquier crisis se mantenía fuerte y me daba el ejemplo de cómo debía enfrentarme a los días oscuros. Mi primer amor ha sido, es y será siempre mi preciada Cecilia. Hasta el día de hoy me deslumbra con su belleza, me quedó admirándola y pienso "definitivamente ningún hombre se merece tanto".  

Tiene una personalidad encantadora, todas las personas que conozco se quedan complacidos con ella y es tan agradable que se te olvidan las penas.

Mamá ha sido reina en un concurso de belleza cuando era adolescente. No creo que puedan imaginar lo hermosa que es. Cuando yo tenía poco o más de 8 años, salíamos a la calle y de repente todos los hombres la miraban o volteaban a verla, se quedaban idiotizados con su presencia. En esa época yo era celosa a horrores y les lanzaba miradas de desaprobación a cualquier idiota que se quedará viendo a mi querida.

Con ella aprendí sobre el rock, el electro, el huayno y la cultura ayacuchana. Sin duda, Ceci es la mujer más interesante, solidaria y divertida que alguien podría conocer. Espero algún día llegar a ser como ella...

No obstante, reconozco que no es perfecta pero ha llegado tan cerca a la perfección que le tengo una envidia admirable. Lo que más admiro de esta diosa es que sabe perdonar y no guarda rencor. Me he equivocado un millón de veces, me he comportado como un animal salvaje inclusive, me alejé y he sido muy indiferente con ella por un buen tiempo. He hablado cosas horribles que desearía no haberle dicho jamás. 

Nuestra relación tiene más de 24 años y a pesar de varias caídas, ella me ama y yo la amo. El amor nos unió desde el primer día en que yo estuve en sus brazos. Me ha enseñado lo mejor y me ha dado tanto amor que podría soportar todo lo que venga. Solo quiero que ella sea feliz.

A pesar de todo lo que haya podido pasar entre las dos, sin pedirlo ella me ha perdonado. Nadie como ella me hace sentir segura y amada. 

Madre, soy tu admiradora y siempre te amaré. 

Espero que alguien me vea como yo te veo a ti.